El contacto visual entre una madre y su hijo hace que se produzca la hormona del amor, la oxitocina, que estrecha la relación entre ellos. Algo parecido sucede cuando un perro y su dueño se ven a los ojos. Esta constatación, producto de la investigación de Miho Nagasawa y su equipo, de la Universidad de Azabu en Japón, es inesperada ya que los cánidos –lobos, dingos, coyotes, zorros, etc.– no tienen la misma comunicación visual que nosotros, nunca ven a sus semejantes a los ojos. Sin embargo, todo indica que el perro integró a su manera de ser esa forma de comunicación humana para relacionarse con nosotros. Los investigadores estudiaron la relación entre la duración del contacto visual y la producción de oxitocina en el perro y el lobo. Realizaron un experimento donde treinta perros y once lobos sostuvieron la mirada con sus dueños y cuidadores por periodos de diferente duración. En algunos casos se pidió a los propietarios que durante el intercambio visual los tocaran y les hablaran. Los resultados revelaron que cuando los perros y sus dueños intercambian miradas de larga duración, la concentración de oxitocina aumenta un 30% en perros y humanos, y se elevan más cuando hay caricias o palabras de por medio. En cambio, en el caso de los lobos no hubo secreciones hormonales pues no se logró el contacto visual. Esta diferencia puede deberse a que los lobos no usan el intercambio de miradas como una manera de comunicarse con los humanos, ya que lo utilizan para amenazar a sus adversarios. Entonces, el desarrollo de ese contacto visual entre los perros y sus dueños puede ser producto de la domesticación.
En un segundo experimento se proporcionó a los cánidos una pequeña dosis de oxitocina, que provocó un aumento del contacto visual con sus dueños, y estimuló una mayor secreción de la hormona del amor. Curiosamente este fenómeno se dio sólo en las perras.
Con este estudio se puede explicar en parte por qué consideramos a nuestro perro un miembro más de nuestra familia y aspectos importantes de la domesticación de los antecesores del perro.
Fuente: http://www.sciencemag.org/content/348/6232/333.full
Imagen: http://www.sciencesetavenir.fr/animaux/20150327.OBS5775/proprietaires-de-chien-gare-aux-chenilles-processionnaires.html